El empiece de un año

El año 2020 ha sucumbido, y hemos entrado en un nuevo año, pues bien y que bien todos hemos cumplido años felicidades a todos y a todas, que alegría.

Los reyes magos esta vez se han portado muy bien, nos han traído sus mejores regalos, colas del hambre, ni que estuviéramos otra vez después de una guerra.

Pero lo cierto es que para no variar seguimos en la misma, un año cruel el que nos a dado el anterior, y este nuevo nos trae más nuevas.

A parte de traernos una gran nevada, que se recordará en muchos años, como explotan las calderas y como siempre las entidades correspondientes, por supuesto las de viviendas protegidas, una vez mas ponen trabas y pasan la bola a unos y a otros, total que el perjudicado siempre es el mismo, las personas más vulnerables, en una palabra la culpa una vez mas no es de ellos. Parece que solo cuentan las grandes empresas y los demás somos una mierda pinchada en un palo, dice el dicho.

Pues bien, las eléctricas ahora se dedican a cotar los suministros de la gente mas desfavorecida, aludiendo que semejantes personas se dedican al cultivo masivo de marihuana, pueden ser unos pocos pero no la mayoría. Cómo es posible que por vivir en chabolas se les deniegue lo mas básico, agua, colegios y con tanto frio como ha estado haciendo, se les deniegue la calefacción, y cortes del suministro eléctrico.

Esto es lo que pasa en la Cañada Real, donde ya ha habido algún fallecimiento por frio, ya llevan meses reclamando, el porque les cortan el suministro eléctrico, después de tener enfrentamientos con los antidisturbios.

Bien, también tenemos tenemos quien se aprovecha de la crisis del cabida, para ponerse la vacuna los primeros abusos de la autoridad y el cargo que ostentan.

Primero, se supone que son las personas con mas riesgo, las que obtengan la dichosa vacuna, y no los listos de turno, como ya nos hemos enterado.

El bienestar de todos pasa por la buena salud, epate de la correspondencia que deben tañer los políticos de cara a las personas mas desfavoredidas.

Parece que lo único que les importa es el yo, y que se jodan los demás. Que desfachatez.