El desalojo estaba previsto a las 11 de la mañana, en la vivienda de la calle Juan Navarro numero 27. Desde primera hora de la mañana se concentraron varias decenas de activistas para intentar parar el desalojo.
Esta visto que la unión hace la fuerza, aunque solo sea retrasarlo.
Nancy consiguió su actual vivienda por intervención de la parroquia de San Ramon Nonato. Pagó hasta que pudo hacer frente.
Desde que dejó de disponer de los ingresos de la Renta Mínima, ya no pudo pagar, cuando se la volvieron a activar pago casi la totalidad de la cuantía, faltaba solo pagar el alquiler parcial de tres meses unos 900 euros, pero al día de hoy le reclaman una deuda de 2.000 que por lo visto ella no reconoce como suya.
El edificio entero esta gestionado por la parroquia. Sus ocupantes se encuentran en exclusión social y ya se han producido tres desalojos en el edificio y dos están a la espera. Los vecinos creen que la actual propiedad quiere vender el edificio a un fondo de inversión.
Quieren desalojar todo el edificio, los vecinos tienen miedo no entienden lo que ocurre, no tienen a donde ir, son personas mayores, familias con problemas. Es una pena que un edificio gestionado por la parroquia se permita este drama, no se les ofrece ninguna solución digna por parte de las instituciones publicas, esto no debería ser así.
STOP DESAHUCIOS.
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