5 de junio de 2014

¿Qué más quieren?


El Fondo Monetario Internacional publicó la semana pasada su ya habitual informe sobre la economía española. Un informe anual rutinario que el FMI hace para todos los países miembros y redactado por los economistas del FMI encargados del seguimiento del país objeto del informe, tras visitarlo. Un informe consultivo cuyas recomendaciones no son nada más que eso, recomendaciones.


No son condiciones, ni obligaciones, que esto les quede claro a los que gobiernan o puedan gobernar en el futuro, por si acaso alguien se llama a engaño y decide hacer lo que los españoles no queremos bajo ningún concepto.

Aclarado este aspecto del informe, que creo muy importante, es de rigor reconocer que el informe de marras nos da una de cal y otra de arena, algo así como eso de “tengo dos noticias, una buena y una mala ¿Cuál quieres escuchar primero?”. Pues bien, por un lado el FMI  reconoce que la economía española ha mejorado y lo sigue haciendo aunque lentamente, pero por otro lado, aquí viene la mala noticia, advierte que existen dos aspectos de nuestra economía que sería conveniente revisar: el elevado índice de paro y la creciente deuda pública. España necesita que su economía crezca a ritmos más elevados que los actuales, acelerando así su recuperación.



Y ante estas dos asignaturas pendientes de nuestra economía, ¿qué propone el FMI?

Pues bien, aquí viene lo mejor, porque el FMI recomienda a España tomar medidas en cuatro aspectos muy significativos:

Ayudar a las empresas a crecer, contratar e invertir

Reducir las barreras regulatorias para impulsar el empleo y el crecimiento”

Continuar una consolidación fiscal que favorezca el crecimiento y el empleo

Más apoyo de Europa

Para lograrlo, algunas de las medidas que se deberían adoptar, siempre según las cabezas pensantes del FMI, serían:

Continuar con la reforma laboral que el FMI considera aun insuficiente.

Una mayor moderación salarial a través de un acuerdo social entre patronal y sindicatos.

Un nuevo aumento de los impuestos.

Una profunda reestructuración del sector financiero.

Aumento del crédito para familias y empresas.

Aplicación de la ley de unidad de mercado.

Reducción de barreras que dificultan, cuando no impiden, el crecimiento de las empresas.

Liberalización de los servicios profesionales.

Búsqueda de una solución duradera al déficit de tarifa eléctrica.




¿Y Europa? ¿Qué se le recomienda  hacer a la Unión Europea?

La  Unión Europea debería prestar una mayor ayuda principalmente con:

Avances mayores y más rápidos hacia una unión bancaria completa.
 
Nuevas medidas del Banco Central Europeo encaminadas a reducir los mayores costes de financiación a los que se enfrenta el sector privado español.
 
Pues bien, visto lo visto y tras haber leído todo lo anterior, parece ser que el FMI tiene bastante claro que los recortes deben continuar.

¡Y se equivocan! La situación de la economía española no está para soportar más ajustes presupuestarios y nuevos recortes salariales. La creación de empleo va en función de las ventas reales y las previsiones de las mismas, y si no hay ventas no hay oferta de empleo, porque los empresarios contratan cuando tienen expectativas de producción y ventas.

¿Acaso creen sincera y honestamente en el FMI que la recuperación se puede conseguir con una nueva reducción de los salarios? Y en un mercado laboral en el que, la mayoría de nuevos contratos son temporales o a tiempo parcial. 

Opino que el momento de los grandes recortes y ajustes ya ha pasado y que éstos, están dando sus frutos. Ahora lo que los ciudadanos de este país necesitamos, es creer que se ha iniciado el crecimiento, aun moderado, que poco a poco nos llevara a una recuperación definitiva. Necesitamos optimismo, no mas hachazos a nuestras maltrechas economías familiares.

Deberían tener en cuenta los técnicos que han pergeñado el informe del FMI, que es el consumo interno la principal herramienta para la recuperación definitiva de la economía española, porque de seguir así nuestra economía no se recuperara jamas y España se convertirá en el principal suministrador de mano de obra barata de la Uníón Europea, en la China de Europa. Aunque, si lo pensamos detenidamente, igual es lo que pretenden. Con esta gente nunca se sabe. Mejor no confiarse demasiado.




¿Y el Gobierno? ¿Qué se cuentan desde el Gobierno?

El ministro de Economía, Luis de Guindos, ha asegurado que el Gobierno "no tiene que seguir al pie de la letra" lo que dice el Fondo Monetario Internacional. Cierto, pero entonces ¿por qué Guindos ha dejado una ventana abierta a las recomendaciones del FMI? Porque tras la primera declaración, ha continuado diciendo que, "tomarán más medidas en todo lo que tiene que ver con la reducción y la reestructuración de la deuda de las empresas". Y en lo que a los impuestos respecta, no es una ventana, es un portalón lo que ha dejado abierto: "el Gobierno no va a modificar ningún tipo de impuesto que no venga derivado de modificaciones estrictas de la normativa comunitaria".

La pelota para Europa y nosotros, mucho me temo que a sufrir una vez más y a pagar.

Y a todo esto, ahora el FMI se desdice, haciendo buena la expresión “y donde dije digo, digo Diego”. En un comunicado la institución monetaria afirma que "el FMI no ha recomendado reducir los costes del despido a 12 días por año trabajado, como se dice erróneamente en algunos informes de prensa” y continúan, "lo que hemos recomendado es mejorar el equilibrio entre los contratos indefinidos con elevada protección y los contratos temporales precarios, de forma que se favorezcan la creación de empleo y un mercado laboral más inclusivo. Esto no implica una reducción como la descrita en informes de prensa".
Y la pelota de vuelta. ¿A quién debemos creer? 
La verdad, yo ya no me fío ni de mi padre.

No hay comentarios:

Publicar un comentario

¡Gracias por tu comentario! Aparecerá dentro de poco publicado