9 de junio de 2016

Caminantes


¿Qué pasa con los refugiados africanos ? los echamos de menos, con eso de los sirios, iraquíes y demás personas  procedentes de oriente medio. Ya no se habla de las cuchillas que tanto se fabrican en España, o de los CIES, que en realidad son cárceles para personas que su único delito ha sido huir del hambre y la guerra. Por el hecho de ser de otro color, es decir negro, ¿no tendríamos que aceptarlos ? Son refugiados también. Ningún ser humano es ilegal.

Todo parce ser que en este país, nos educaron racistas aunque lo neguemos. Ahora se habla de  ismlamofobia , ¿ realmente creemos que si admitimos a refugiados con religión islamitas , nos traerán la guerra y el terrorismo ¿  el problema está en la venta de armas, para conquistar esos países y adueñarse de sus riquezas. Los europeos no tenemos derecho a obligarlos a que cambien de religión o de cultura.

Parece ser que tenemos miedo al islamismo, pero no es eso el motivo. España ha convivido muchos años con judíos y musulmanes en concordia y no ha habido más problemas, entonces  parece que si se pude llevar el tema social bien entre religiones. Pero ellos no quieren vivir en Europa, sino huir de las bombas y desmanes de poder, y ejecuciones masivas por parte de los radicales. Políticas que llevan a cabo en esas tierras, por parte de EEUU, Rusia, Europa y los gobiernos dictatoriales, con bombas y destrucción de la población.

A todo esto los europeos no se ponen de acuerdo en el reparto de refugiados, a pesar de las ayudas económicas dictadas por Bruselas. A pesar de las amonestaciones económicas, España se niega a recoger a los refugiados, se comprometió a recoger a 16.000 y lleva más o menos unos 20. Mientras esas personas se hacinan en campos parecidos a los que había en la segunda guerra mundial, repartiendo los alimentos como si fueran animales. Todo ello lleva a buscar otras rutas, el que tiene dinero recurre a las mafias, que siempre están dispuestas y los que no recorren largas marchas andando, encontrando por el camino grandes dificultades en las fronteras.

Como dijo el poeta: Caminante no hay caminos, el camino se hace al andar, y al mirar atrás veras la senda que nunca has de pisar. Actualmente el Mar Mediterráneo parece un gran cementerio de personas ahogadas, todas intentando llegar a una meta insalvable para ellas, ya que a pesar de librarse de las bombas se enfrentaran a una sociedad que no los comprenderán.

Según una crónica echa por la periodista María Antonia Sánchez del País, en el diario de Médicos sin Fronteras: " Dejan en el limbo humanitario  a casi 50.000 personas atrapadas en Grecia a inicios de marzo por el cierre de las fronteras balcánicas, el pacto UE-Turquía cierra en falso la crisis y no solo porque los recién llegados son más que los expulsados; también porque al esconder una realidad innegable, la hace desaparecer de los medios. Solo un naufragio masivo u otro caso grave lograrían  devolver el drama a palestra. Además el pacto solo ha trasladado el problema, reactivando la peligrosísima travesía de Libia a Italia."





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